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Habiendo transcurrido diez años del gobierno Kirchnerista, distintos sectores hacen un análisis buscando 

sintetizar lo bueno y lo malo. Es de hacer notar que en lo referente al Canje de Deuda Pública Nacional no 

hubo prácticamente diferencias entre gobierno, oposición y medios periodísticos y lo catalogaron como 

muy bueno, a pesar de que fue una oferta unilateral no negociada y que en el 2005 no se canjeó gran parte 

de la que era la porción externa. Esto obviamente nos dejó sin Crédito Internacional a tasas bajas como 

disfrutan desde hace años nuestros vecinos y con la consecuente falta de empleo legítimo.

Es así que “archienemigos” del presente, pero socios hasta el 2007 como el Grupo Clarín, y demás medios 

como el diario la Nación, a través de sus principales voces, como Bonelli, Tenenbaum, y Scibona 

indirectamente entre muchos otros y/o a través de notas no firmadas ratifican lo nombrado.

No hay que olvidar que estos medios y gran parte del empresariado local se beneficiaron y mucho con la 

licuación de sus deudas y /o con subsidios que les otorgaran tanto la dupla Duhalde – Lavagna como el 

Kirchnerismo específicamente. Pero lo raro es que se “olviden” que si Argentina sigue hoy sin poder entrar 

al Mercado de capitales internacional es porque nunca salió del default a pesar de extrañas teorías que 

aducen que JP Morgan, si mal no recuerdo, le había asignado un riesgo país igual que al de Brasil desde 

fines del 2006, algo que es injustificable por la gran porción de deuda externa defaulteada remanente a ese 

momento. Y peor a partir del 2007, cuando empezaron a subestimar el CER para estafar a aquellos pobres 

diablos que habían aceptado canjear sus bonos defaulteados por papeles emitidos bajo legislación nacional, 

lo cual no dejó dudas de la mala fe de las autoridades de ese momento.

Casualmente tampoco demuestran buena fe los empresarios de medios cuando aluden a que el 7 % de la 

deuda remanente que queda defaulteada está en manos de Fondos Buitres, refiriéndose despectivamente 

a los Hedge Funds, siendo que existen numerosos particulares, argentinos y extranjeros con juicios ganados 

en los tribunales de NY ( además de una porción en juicios en el CIADI), agregando además que de 

resolverse a favor de los litigantes el juicio de Pari Passu en NY eso precipitaría a un nuevo default y podría 

complicar negociaciones en países que tuviesen que renegociar sus deudas soberanas. Existen suficientes 

muestras que esto no es así porque la casi totalidad de las deudas públicas remanentes están ligadas a 

CACs* gracias al accionar del FMI, organismo que ahora se suma a esa misma prédica sin ningún asidero 

real. Recordemos cuando a fines del 2001(El FMI) fue la punta de lanza que precipitó el golpe de Estado 

contra el gobierno de De la Rua y el tan buscado default por la clase empresaria y dirigente local que 

después tomaría el poder. 

La negación de los derechos de los particulares ha sido una constante compartida por la mayoría de los 

empresarios y políticos argentinos beneficiados con la licuación de sus deudas, así como por el FMI que 

siempre aboga por las instituciones financieras y no por las personas. Estos derechos tampoco han sido 

respaldados por la Justicia local que en los últimos diez años se hizo la distraída cuando no fue cómplice.

Es muy difícil resguardar nuestros derechos cuando tanto oficialismo como oposición y gran parte de los 

Medios (de noticias) comparten el “relato” que nos discriminó hasta el presente, por más que venimos 

denunciando las violaciones sufridas a lo largo de la “década ganada” del Kirchnerismo. Todos están de 

acuerdo en no reconocerlos.

*CACs: Cláusulas de Acción Colectiva