El país de no creer
Gian Pautasso
Presidente, Juventud Libertaria.



El presidente Alberto Fernández es noticia hoy por un nuevo bochorno en la quinta de Olivos. No estamos hablando de lo ocurrido con Florencia Peña ni tampoco de las reuniones con Moyano. Estamos ante otra situación vergonzosa llevada a cabo, como ya es costumbre por el presidente de la República, esta vez porque se realizó en pleno aislamiento: el cumpleaños de la primera dama.
 
Esto parece un dato impactante, pero más impactante se vuelve cuando personas defensoras del oficialismo levantan la moral de Alberto Fernández por medio de justificación y pasos de culpa de una persona a otra. Esto se vio reflejado en declaraciones como la de Aníbal Fernández, quien señaló: "¿Que iba a hacer, cagarla a palos?".
 
Con este tipo de justificaciones o las declaraciones del propio presidente, quien le cargó toda la culpa a su mujer diciendo: "Fabiola convocó a un brindis que no debería haberse hecho", cuando en realidad esto transcurrió en la quinta de Olivos.
 
Parece un chiste que mientras personas como Facundo Astudillo Castro, quien fue un desaparecido durante el ASPO, o el padre de Solange, quien no pudo despedir a su hija con cáncer cuando ver a su papá era su último deseo, no tengan ninguna herramienta de reclamo contra la violación de un DNU, que el propio presidente impuso.
 
Perdiendo así, la igualdad ante la ley y como tal, afectando gravemente el estado de derecho para los habitantes de la República Argentina.
 
No sólo estamos ante un bochorno de categoría internacional, también estamos ante el decaimiento de la Argentina como república federal, presenciando el grave deterioro del estado de derecho y la diferencia en los mismo entre la casta política y la sociedad.
 
 

Últimos 5 Artículos del Autor
[Ver mas artículos del autor]