Fundación Atlas 1853

EE.UU.: “La belle indeference” Fracaso y éxito

Ricardo Calvo

Ingeniero y médico cubano.

En los últimos meses la situación económica y social de los EE UU ha sufrido una decaída paulatina bajo la actual administración socialista ubicada en Washington, D.C. la cual ha sido objeto de fuertes críticas por el partido opositor.

Como consecuencia del deterioro en los niveles de vida económica y de la falta de cumplimiento de principios constitucionales se predice una derrota de la tendencia socialista regente de una magnitud significante en los próximos comicios parciales de este noviembre que se efectuaran a lo largo de la nación. Sin embargo, es poco frecuente encontrar en la prensa nacional, que los socialistas ampliamente controlan, una respuesta vigorosa y persistente que niegue tal presagio sino más bien se nota una actitud pasiva, casi admitiendo, que en realidad sufrirán una derrota notable en estas próximas elecciones.

Ese comportamiento se puede caracterizar con el termino psiquiátrico: “la belle indeference”. El término "la belle indifference" es un término francés que se traduce como "bella indiferencia" y se define como la ausencia paradójica de malestar psicológico a pesar de padecer una enfermedad grave o síntomas relacionados con un problema de salud.

¿Y qué podría justificar llegar a adoptar esa postura ante una perdida posible del control de los organismos legislativos de la Nación?

Hay que recordar que el control político de las cámaras legislativas de los EE UU no garantiza que la mayor parte de las medidas ya implementadas hacia el socialismo pudieran ser derrocadas pues el ejecutivo tiene amplio poder de vetar leyes que tuvieran tal objeto y/o abusar abiertamente de legislar a través de “ordenes ejecutivas”. Además, y de gran importancia, es considerar que todos los resultados de las medidas adoptadas por los socialistas en los dos primeros años de la Presidencia actual florecerán ampliamente después de estas elecciones parciales próximas.

Recordar que en 2024 habrá elecciones Presidenciales y durante la campaña electoral correspondiente se puntualizarán las condiciones detrimentales del país. Se verán los resultados a largo plazo de la apertura de la frontera sureña, el desprecio por el Estado de Derecho, la falta de apoyo a los órganos de protección del ciudadano, el gasto estatal descontrolado y la inigualable inflación resultante, la devastación de las fuentes de energía de hidrocarburos y la intromisión estatal socialista en la dirección de la educación primaria y secundaria además de los desacertadas medidas a nivel internacional en el lejano y medio oriente.

Estos pasos en la política domestica e internacional resultarán en una recesión económica que será fácilmente achacada al partido anti socialista que a través del cuerpo bilateral legislativo tratará infructuosamente de subsanar el daño ya entonces casi incontrolable. Los socialistas enarbolarán la bandera del fracaso post elecciones parciales 2022 y se presentarán como redentores del mal que ellos iniciaron, pero habilidosamente se liberarán de toda responsabilidad. Por lo general, los pueblos carecen de buena memoria y favorecen con el voto a candidatos que prometen reaccionar a las condiciones del momento. Fácilmente el Congreso y la Presidencia pasarân de nuevo a manos de los socialistas de antaño a partir del 2024.

He ahí la razón de la “belle indeference”. Dejad que las fuerzas conservadoras ganen las próximas elecciones parciales y controlen la legislación pero nunca podrán en realidad librarse ni de los resultados post 2022, ni de las acusaciones de los socialistas los que eventualmente tomarán fácilmente el control de todas las ramas del gobierno pues para entonces jugarán el papel de “salvadores”. Esta es una especulación personal pero está basada en mi experiencia adquirida en mi juventud al ser testigo de la socialización metódica de una sociedad de libre mercado y poder confirmar las resultados previstos.

Este fenómeno y/o táctica política ha sido habilidosamente utilizada con anterioridad en todos los países y los EE. UU. no dejan de ser una excepción. Dejad pasar una derrota y más tarde lograr un éxito amplio y duradero.